El estudio que se ha realizado sobre la villa de Ágreda tuvo su origen en un encargo de la Dirección General de Patrimonio y Promoción Cultural de la Junta de Castilla y León para analizar la muralla de Ágreda y su relación con la ciudad para, en consecuencia, establecer un plan o programa de actuación. El análisis de las murallas medievales de una villa castellana, con sus apartados de estudio histórico, urbanístico y físico, así como las correspondientes propuestas de intervención o planeamiento, constituía un empeño altamente sugestivo por la intensa influencia existente entre muralla y organismo urbano en la génesis y formación de las villas de la región.